La paradigmàtica de Margot.

Margot es un ser incandescente.

Es intrigante y enigmàtica , se me va revelando solo de a poco a pesar de ser un producto de mi prosa. Supongo que tendrà alrededor de 65 años, serà francesa y muy amiga de las liturgias cotidianas.

Està compuesta, como muchos de todos Los nosotros, por verdades fundamentales que no solìa cuestionarse. Axiomas acerca del nùcleo, un poco del clero, otro tanto acerca de la negra funda definitiva y algunos tòpicos de interès general. (el tic tac y el boom entre ellos)

Ahora bien, la filosofìa del conocimiento la tiene hecha bollo desde que llegò a sus oìdos esa apocalìptica teorìa de que no hay verdades absolutas, de que solo podemos confiar temporalmente en estas afirmaciones hasta que tengamos las armas para aniquilarlas.

" Al final - piensa- resulta que somos demasiado fràgiles, una trompada cognoscitiva o una estùpida puñalada empìrica alcanzan para desgarrar nuestras convicciones, ùltimos ropajes de la personalidad ".

Supone llegar a la conclusiòn de que lo ùnico absoluto que le queda es la certeza de estar en constante cambio, y esta suposiciòn le da cierta temporalidad en lo seguro .

¿ O en lo inseguro, Margot?

¿ Esta pregunta es definitiva y absoluta o cambiarà la pròxima vez que la leas?

Entonces pasarìa que buscar la coherencia a rajatabla en uno mismo es tan idiota e imprudente como perpetrar un paradigma en las ciencias.

Encarcelar lo inaprensible, domesticar lo volàtil.